Míster Balón

Copérnico lo dijo primero, Galileo lo propagó: "La tierra es redonda, igual que un balón de fútbol".


Neymar, por favor, quédate en Brasil. Quédate en tu tierra, quédate en tu Santos del alma, pero, por favor, no vengas a Madrid ni a Barcelona. Un día que sí, otro día que no. Que si cláusulas secretas, que si después del Mundialito de Clubes o tras las Olimpiadas. Neymar, no vengas. Eres otro Robinho, otro más del montón que mucho promete pero poco hace. Eres un reclamo para vender camisetas, pero probablemente seas otro espantador de títulos. Mucho regate, mucha filigrana, bicicletas y ronditos, taconazos y crestas de gallo, pero nada de nada. Neymar, ni eres ni serás nunca un Messi, ni un Cristiano, ni un Zidane, ni un Ronaldinho. Neymar, no serás nunca un Iniesta ni un Xavi ni un Cesc ni un Thiago. Serás un bluf y, Neymar, sinceramente muchos estamos ya hasta el gorro de tanta tontería.

0 comentarios:

Publicar un comentario