Las filias y las fobias del director de Marca, Eduardo Inda, están causando un gravisimo daño en la credibilidad del rotativo líder en la prensa deportiva. Existe ya una amplia corriente en contra de las campañas durisimas e injustificadas, la falta de conocimiento de la dirección (da la sensación de que no había visto un partido de fútbol antes de que lo trajeran de la delegación de El Mundo de Baleares para dirigir Marca) y sus erradas apuestas como el ya famoso "Bien vendido" con el que quiso justificar una de las ventas más desacertadas de Florentino Pérez. El señor Inda piensa que el periódico deportivo que dirige debe ser más forofo que Manolo "el del bombo" y tan sectario como el régimen castrista y así le va. No puede hacer más el ridículo con sus campañas de acoso y derribo a personas como Pellegrini, quien ha demostrado ser un entrenador de alta valía y de mayor educación que quienes le maltratan del modo más insidioso un día sí y otro también en la prensa. El Marca ha perdido todo sentido de autocrítica y en estos momentos no es más que el periódico de los forofos indocumentados del club merengue. El intento de Inda de manejar el club desde fuera es tan descarado que bien haría la actual dirección del Real Madrid de mantenerse lo más lejos posible.
Luego está el ridículo de las portadas como la del pasado lunes después de la Liga, pidiendo el cese del entrenador madridista y concediendo un mínimo espacio al título liguero ganado por el Barcelona. El señor Inda debería entender que hay mucha gente a la que le gusta mucho el fútbol y la objetividad, y poco las tonterían que hace tan a menudo. Esta es la portada que a muchos nos gustaría ver publicada a no más tardar.