Míster Balón

Copérnico lo dijo primero, Galileo lo propagó: "La tierra es redonda, igual que un balón de fútbol".

Al Málaga le ha tocado la lotería con Albert Luque. El delantero catalán retorna a la Rosaleda tras solucionar sus problemas contractuales con el Ajax de Amsterdam. La carrera del internacional español entró en barrena cuando tomó hace cuatro años la decisión de abandonar el Deportivo de La Coruña, estando en la cima de su carrera como goleador temible y jugador de banda implacable, para ir a Inglaterra para jugar con el caótico Newcastle. Club que, como todos ya saben, acaba de descender a la First Division y en donde han fracasado jugadores de la categoría de Martins y Owen. El destino de Luque no fue distinto y su trayectoria, salpicada por las lesiones, se fue por el sumidero. Hace dos años se agarró desesperado a la oportunidad que le brindó el Ajax, pero allí tampoco cuajó. Finalmente, Luque regresó la temporada pasada a la Liga y volvió a demostrar su gran clase aupada en una zurda excelente y con una capacidad de pegada de eficacia contundente. Ya sea en la banda izquierda, posición donde lo descubrió Irureta en el Depor, de nueve o de segunda punta, Albert Luque tiene calidad y capacidad para rendir en cualquier equipo de Champions. Las circunstancias han querido que a sus 31 años vaya a jugar a Málaga, agradecido a la oportunidad que le dio Sanz el año anterior. Con Luque el club malagueño se permite un lujo. Un Ferrari en el parking.

El Real Madrid acaba de confirmar la marcha de Gabi Heinze al Olimpique de Marsella, de Deschamps y Morientes. El ya ex madridista es un ejemplo de los fichajes poco rentables e inútiles de los que habla el presidente Florentino Pérez. Hace dos años, el equipo blanco pagó 12 millones de euros por su contratación procedente del Manchester United con una ficha en torno a los 4 millones de euros. Dos años después abandona Concha Espina sin un euro a cambio, sólo con el hecho de liberar al Real del pago de su abultada ficha durante los dos años que todavía le quedaban de contrato. En definitiva, si sumamos los 12 millones que costó a los 4 que se embolsó cada años, tenemos que el argentino ha costado 20 millones de euros por dos temporadas. Un fiasco de fichaje que sólo rindió bien en la primera temporada, en la segunda fracasó casi tanto como ese tal Faubert.


Con el mercado futbolístico bloqueado por la falta de parné. Una buena solución es el trueque, y tenemos como ejemplo más inmediato el de Eto´o e Ibrahimovic. Aunque, en este caso, habría que hablar más bien de timo porque me parece a mi que Ibrahimovic, pese a ser un fuera de serie, no vale lo mismo que el camerunés más 45 millones de euros y la cesión de Hleb. Decía que una buena solución sería el trueque, ya sea a modo de préstamo o como traspaso. Sabemos que el Real Madrid busca un mediocentro organizador y sabemos que el Valencia no quiere a Ever Banega y que busca un mediocentro de contención al estilo Albelda. Entonces, ¿por qué no un trueque Gago-Banega por una temporada? Un trueque a modo de cesión por un año, con opción de compra para ambos clubes. A pesar de la venta de Javi García al Benfica, el equipo de la capital de España tiene exceso de jugadores de contención porque a la presencia de Gago (quien no ha terminado de cumplir las expectativas) hay que añadir las de Lass y Mamadou Diarrà. Uno de estos tres sobra y quien más posibilidades tendría de salir en una operación de este tipo sería el argentino. Por otro lado, el Valencia conseguiría sumar a su plantilla un futbolista más cuajado y más centrado que Banega, quien tiene unas condiciones envidiables y una visión de juego fuera de toda duda pero todavía no ha dado ni el 20% de lo que se le espera en el año y medio que lleva en España. Es sólo una idea.

"Faltó gente que me dijera a tiempo cuando debía soltar la pelota, cuándo regatear. Alguien que moldeara mis condiciones naturales. Porque yo era un jugador diferente, poco normal. Ahora aspiro a desarrollar esta tarea con los chavales". Son palabras de Onésimo Sánchez, ex jugador del Real Valladolid, Barcelona, Cádiz, Rayo Vallecano y Burgos, entre otros. Las palabras de alguien que reconoce haber desperdiciado un innegable talento por no centrarse en mejorar sus condiciones, mejorando en sus defectos y haciendo un buen uso de sus muchas virtudes. La carrera futbolística de Onésimo es la de un deportista con unas condiciones extraordinarias pero mal enfocada, abusaba de sus condiciones para el regate en todas las zonas del campo convirtiéndo en estériles sus muchas virtudes. Onésimo fue uno de los jugadores con mejor uno contra uno de Europa, un delantero con chispa, con una técnica y un regate endiablado, buen pasador (cuando la soltaba) y poco goleador. Es curioso que un futbolista con una carrera tan errática haya dejado tan buen recuerdo y tanta impronta en la memoria de muchos espectadores de las décadas de los 80 y los 90. Hasta Johan Cruyff se fijó en él y lo fichó para su Barcelona, pero una vez en la ciudad condal jugó muy poco y al año siguiente lo devolvió al Valladolid. El denominado "rey del regate" pudo haber sido más pero no quiso o no supo hacerlo. En definitiva, fue un "chupón" sin remedio, había un balón para él y otra para el resto. Pero verle jugar era un deleite... hasta que el entrenador le sustituía harto de su anarquía.

Diego Tristán vuelve a España para jugar en el Cádiz. La contratación por parte de la entidad amarilla de un delantero de la talla del sevillano debería suponer un acicate para los aficionados del Carranza. La carrera de Diego Tristán es de alguien que pudo ser y fue, pero que pudo haber sido mucho más. Uno de los mejores delanteros españoles de los últimos veinte años, con una calidad técnica a la que ninguno se le acerca, el delantero no ha llegado a jugar en un club puntero de España y de Europa por culpa de una vida fuera de los campos supuestamente desordenada. Es cierto que a Tristán se le ha podido tachar de indolente y de poco serio, pero también es verdad que durante varias temporadas sus números (con cifras de 30 goles por año en el Depor) podían servir para callar a muchos. Objeto de deseo por clubes de Italia y de Inglaterra, Diego Tristán se marchó tarde, ya en el ocaso de su carrera, y aún así tuvo tiempo para dejar su sello en el West Ham, quien no ha podido retenerle para disputar la próxima Premier. Y es que el carácter de Diego le ha llevado a tomar decisiones como la de rechazar jugar en la élite inglesa para irse al Cádiz, recién ascendido a Segunda División. En la Premier echarán de menos sus golazos.

Leo en la prensa que el Real Madrid ha pagado la cláusula de recompra de Granero (4 millones de euros) para suplir la posible no contratación de Xabi Alonso con aquello del dicho de bueno, bonito y barato. Si alguien piensa que Granero es un organizador con capacidad de suplir al donostiarra, lo lleva claro. El canterano es un buen jugador de banda, fuerte, con recorrido y con buena técnica, pero en absoluto es un repartidor de juego. Granero, con sus muchas virtudes, carece de la calidad necesaria para ejercer de organizador, algo que, por ejemplo, sí es capaz de hacer Rubén de la Red. Esperemos que el bueno de Rubén pueda volver a jugar pronto, porque fútbol tiene para regalar. Si el Madrid recupera a Granero para que supla a Cristiano Ronaldo en la banda derecha me parece bien. Pero si lo que pretende es hacerse con un organizador bueno, bonito y barato, se equivoca de pleno con Esteban Granero.

La Real Sociedad ha fichado para esta temporada al entrenador uruguayo de origen vasco Martín Lasarte quien procede el Nacional de Montevideo, con quien en hace cuatro años obtuvo un título liguero. Pocas cosas más se saben de este técnico que tampoco ha entrenado en otros clubes punteros del continente sudamericano. Ni en Argentina ni en Brasil. Dicen que es muy trabajador y que prepara muy bien los partidos, pero eso no da mucha seguridad de éxito en la competitiva Segunda División. En sus primeras declaraciones he notado a Lasarte un tanto despistado y poco informado sobre la categoría y sobre los jugadores. Me da que no termina la temporada, me da que el club txuri urdin ha errado en la elección como lo hiciera con Juanma Lillo, y me da que otro año más dilapidan sus posibilidades de subir a mitad de temporada. Hagan sus apuestas.



Pasan las semanas y nada se mueve en el futuro del valenciano José Enrique. El joven lateral izquierdo del Newcastle vive momentos de zozobra en su club al igual que el resto de sus compañeros. Con el club en venta, hundido en la First Division y sin entrenador siquiera, José Enrique está deseando escapar de su club. Los "urracas" atraviesan una de las peores crisis de su historia y la mayoría de los jugadores intenta irse a la fuga. Ya se ha escapado el ex "golden boy" Michael Owen, en dirección al supercampeón United. José Enrique bien podría cubrir una plaza en esa banda izquierda del Real Madrid o del Atlético de Madrid aún con carencias. El Barça no le ha tenido en cuenta y se ha decantado por la contratación de un brasileño que no tiene ni la mitad de la capacidad defensiva y la proyección de José Enrique. Un fichaje de 5 millones de euros que solucionaría los problemas de muchos equipos en su banda izquierda y con olor a futuro integrante de la selección, como ya lo hizo en la Sub 21. Pero va a ser que no.

En pleno socarre veraniego, acaba de saltar la noticia de que después de la acertada compra del "Apache" Tévez el City ha contratado para las próximas cinco temporadas a Emmanuel Adebayor, delantero centro del Arsenal. Mucha necesidad económica deben tener los gunners para traspasar al excelente goleador togolés, quien baja un escalón en lo deportivo pero seguro que en lo económico sale ventajoso. Adebayor es un delantero en torno al 1,95 de estatura con muy buena coordinación, ágil, habilidoso, técnico y con buena visión de la jugada. Para cubrir su posición el Arsenal deberá contratar a otro delantero porque Bedner, Walcott y Van Persie hoy por hoy no son los más indicados para llevar la camiseta del 9. Quien sabe si ahora se abre una nueva oportunidad al Real Madrid para vender a alguno de sus delanteros. El caso es que mientras que se habla de Ibrahimovic, de Eto´o y de Villa por cifras astronómicas los jeques del City han demostrado que no son tan tontos y se han hecho con los servicios de un superdelantero por 30 millones de euros. Para ver al togolés en acción: http://www.clipser.com/watch_video/1124915

En estos tiempos de crisis económica, en los que se fichan a futbolistas a coste cero, o por el viejo método del trueque o por cantidades que rondan escasamente los 300.000 euros, en estos tiempos de penuria es cuando las direcciones deportivas de los clubes de fútbol cobran mayor valor. Equipos que llevan años con una secretaría técnica en entredicho lo tendrán más difícil ahora que sus menguados presupuestos no les permitirán lanzarse a por los principales jugadores del escaparate. Esta temporada no habrá dinero (salvo para el Madrid y el Barça, claro). Este año no habrá tiempo para reaccionar. De ese modo, la planificación adecuada de la temporada desde el verano tendrá una vital importancia este año. Por ese motivo, directores deportivos y secretarías técnicas que llevan años funcionando bien lo tendrán más fácil, conocen mejor el mercado y están acostumbrados a rebuscar entre la pleyade de futuras promesas. El Oporto ha vendido este verano al lateral zurdo Sissoko por 15 millones después de comprarlo en enero por 300.000 euros, también ha vendido a Lucho González por cerca de 20 millones y a Lisandro López. Los dragoes saben comprar y vender muy bien. Qué le pregunten al Real Madrid cuanto pagó por Pepe.
En España, hay otras secretarías técnicas que funcionan estupendamente. Es el caso de la liderada por Monchi en el Sevilla, que es muy posible que este año venda al ya amortizado Luis Fabiano y comprará a un punta semidesconocido al que revalorizar. Otras direcciones deportivas que funcionan bien en nuestro país con las del Deportivo de la Coruña, Mallorca, Getafe, Almería y Villarreal. En cambio, últimamente deja mucho que desea el trabajo de las secretarías técnicas del Atlético de Madrid, Betis, Espanyol, Zaragoza y Osasuna, entre otras. Este año el margen de error será mínimo. Todos necesitarán un Monchi.

El Atlético de Madrid parece estar más tieso que la mojama. Después de las importantes cantidades de dinero gastadas en temporadas anteriores parece que este año las arcas colchoneras no están para ninguna alegría. Los rojiblancos han acertado de lleno con las incorporaciones de Asenjo y Juanito, este último viene gratis. Los otros dos sudamericanos son una incógnita a despejar, también a regresado Jurado pero parece que no se cuenta mucho con él, lo mismo que con Reyes, un ex crack con una desorientación al estilo Ronaldinho. El Atleti sigue sin solucionar su principal problema, la ausencia de un conductor de juego. El mismo problema que el Real Madrid. Deben los rojiblancos solucionar este problema que llevan ya muchos años sin resolver, pero mientras no tengan un organizador no podrán aspirar a nada serio. Quizá si se precipita una venta de entidad como la de Forlán, la secretaría técnica se atreva a ir a por un buen mediocentro. Un buen organizador asequible tanto para el Atlético como para el Real Madrid sería Joao Moutinho: 22 millones de cláusula. La contratación de un organizador es el salvoconducto para empezar a aspirar a cosas serias.

Si Cristiano Ronaldo ha llegado al Real Madrid para cuestionar el trono de Messi en la Liga. El inminente traspaso de Ibrahimovic al Barça se produce para intentar eclipsar a otro de los nuevos galácticos madridistas, hablamos de Kaká. La noticia del acuerdo entre Inter y Barcelona para traspasar al jugador sueco viene a reequilibrar mediática y futbolísticamente a ambos planteles. Si hoy por hoy Cristiano y Messi se discuten quien es el mejor del mundo, Ibrahimovic, Kaká y Ribery hacen lo mismo por saber quien es el tercero, el cuerto y el quinto. Para los degustadores de talento puro y duro Ibrahimovic puede ser calificado perfectamente como el mejor. Dotado de una habilidad excepcional a pesar de su más de 1,90 de altura, de una gran capacidad goleadora que le ha catapultado al puesto de pichichi de la última edición del Calcio, el sueco destaca además por una visión de la jugada y del juego que ninguno de los cuatro grandes futbolistas anteriores tiene en su grado máximo. Desde luego que su fichaje sería un gran acierto del Barcelona, aunque todo hay que decirlo, el grado de mejora de los azulgrana es mínimo dado lo alto a lo que han llegado este año. Ahora, son Eto´o e Ibrahimovic dos jugadores distintos, pero coinciden en una cosa si el camerunés es un incendiario el sueco es otro con un carácter difícil de llevar. En eso son tal para cual.

El innecesario fichaje de Benzemá por el Real Madrid ha dejado el plantel del equipo blanco en una situación de total "overbooking". Seis delanteros para un sólo puesto de "9" es una situación completamente absurda. Con Saviola eran siete los puntas, y menos mal que ya se fue. La solución que queda ahora es acelerar la operación salida que ya comienza a madurar. Los jóvenes Negredo y Huntelaar ya están con las maletas hechas, uno para jugar en el Tottenham y el otro para hacerlo en el Stuttgar. Veinte millones de euros por cada uno tienen la culpa, aunque estoy convencido de que es tal la necesidad del Madrid de aflojar carga que aceptaría otras condiciones aunque fueran peores. Lo malo es que seguramente, tanto Huntelaar como Negredo tendrían sitio en el Madrid pero es precisamente su condición de jóvenes la que les hace apetecibles para muchos equipos. Si culminan estas ventas quedarán en el plantel Benzemá, Van Nistelrooy, Higuaín y Raúl, si bien estos últimos tienen capacidad para jugar en otros puestos como la mediapunta y las bandas. Lo que sí tengo claro es que, de cuajar las dos ventas anteriormente comentadas, no prescindiría de Van Nistelrooy. A su edad puede aceptar el rol de jugador de refresco y además hoy por hoy dudo de que Benzemá sea mejor que él.

En los últimos años no hemos podido ver a Ronaldinho en los campos de juego. Hemos visto a su hermano, el agente, el representante del jugador que siempre mira por su interés y nunca por el del resto del colectivo al que representa. De otra manera, no sería posible que un futbolista con unas condiciones excepcionales para el fútbol hubiera transmutado en el apático futbolista que se arrastra por los campos del Calcio sin marcar las diferencias que se presumen en un crack. La estrella brasileña ha menguado hasta límites imposibles de imaginar, fruto del desapego por el fútbol profesional y el desinterés por cuidarse física y mentalmente para afrontar los desafíos del deporte de élite. Es como si Ronaldinho, una vez alcanzada la cima del deporte rey, hubiera perdido las ganas por seguir jugando. Como un escalador después de llegar al Everest. ¿Y ahora qué? Más montañas.



Es sorprendente la decisión del Manchester United de guardarse en el bolsillo los ¿94 millones de euros de Cristiano Ronado? para invertir sólo en Valencia y Owen como fichajes relevantes. Más si tenemos en cuenta que el ex golden boy ha llegado gratis tras el descenso del Newcastle. Es posible que Ferguson no haya dicho aún la última palabra en materia de contrataciones, pero dudo que el técnico escocés no sea consciente de la pérdida de potencial de su equipo con motivo de la marcha del nuevo 9 del Real Madrid. Quizá piense en darle más minutos a Berbatov, quien el año pasado vio muchos partidos desde el banquillo a pesar de su tremenda calidad. A lo mejor piensa que Valencia puede suplir el trabajo de Cristiano en banda. Sin embargo, está claro que es el conjunto inglés que más debilitado aparenta estar de cara al comienzo de la Premier y de la Champions. Ribery sería una posible solución. Dinero tienen para invertir, desde luego.



La contratación del portero del Real Valladolid, internacional sub 21, Sergio Asenjo, es el mayor acierto de la dirección deportiva del Atlético de Madrid desde la contratación de Sergio Aguero por 23 millones de euros. Asenjo viene al club de la ribera del Manzanares por 6,5 millones de euros. Si ves a Asenjo en acción durante un partido te das cuenta en seguida de que va a ser una estrella de la portería, y de aquí a un par de años cuestionará muy en serio la titularidad de Casillas al frente de la portería de la seleccion española. El guardameta que han contratado los colchoneros va muy bien por alto, es muy ágil y sólo debe mejorar algo en las salidas. Asenjo es un portero sobresaliente, a quien además se le intuye una capacidad de liderazgo fundamental para un equipo con aspiraciones a títulos.

Matías Fernández, Matigol, el ya ex jugador del Villarreal ha sido traspasado al Sporting de Lisboa por cerca de cuatro millones de euros. Su fracaso en el fútbol español ha sido una sorpresa para todos porque las cualidades del chileno hacían presagiar la llegada de un futbolista que podía romper en estrella. Algo que no ha sucedido. ¿Por qué? Dicen que su timidez, sus problemas de adaptación a la vida española y su falta de personalidad para imponer su juego en el equipo han sido la clave de su poca brillantez. El hecho es que Matías Fernández tiene muchas de las cosas que adornan a un buen jugador tales como el desborde vertical, la técnica de disparo para lanzar a balón parado y una buena visión de juego. Le ha faltado esta Liga precisamente lo que es más importante en un delantero: el gol. Y es que llamándote Matigol no puedes anotar sólo dos tantos en esta última temporada.

Raúl Albiol es el mejor central del fútbol español junto al azulgrana Piqué. Es de suponer que la dirección deportiva del club merengue ha diseñado una defensa con el luso Pepe y Albiol como pareja de centrales, en el banco es de esperar que esperarán su oportunidad Garay y Metzelder. Para la banda derecha sigue Sergio Ramos, la incógnita está en la izquierda. Marcelo es más interior que lateral, aunque Pellegrini insistirá en utilizarle en esa posición, y Torres es un buen y cumplidor suplente pero no más. El racinguista Marcano era la mejor opción, por proyección, por calidad y por precio, pero acaba de fichar por el Villarreal. El club amarillo sabe fichar, tiene ojo y lo ha vuelto ha demostrar haciendose con este jugador cántabro.

De este modo, le mejor opción que queda es la de forzar el regreso de Arbeloa, un canterano de la antigua ciudad deportiva, madridista al cien por cien, líder en las categorías inferiores y con capacidad para adaptarse a jugar en todas las posiciones de la zaga. Es cierto que la banda izquierda es su posición menos cómoda, pero este año Arbeloa ha demostrado en el Liverpool su capacidad para cubrir esta posición con total eficacia. Además, dado que el jugador termina contrato el próximo año el fichaje no superaría los cinco millones de euros, y si tenemos en cuenta que Real Madrid percibió por el jugador 1,5 millones cuando lo traspasó al Depor y 2 millones cuando éste lo vendió al Liverpool, podriamos decir que recupera un jugador ya consagrado en la selección española y a precio regalado. Arbeloa debe volver a vestir la camiseta del Madrid, no hay mejor fichaje que el suyo.

Hace dos años el Zaragoza se deshizo de Lafita y lo envió al Deportivo de la Coruña. El joven jugador, un mediapunta de gran calidad técnica y creatividad, y con capacidad para moverse por las bandas, ha cuajado dos grandes temporadas en Galicia. Lendoiro no quería soltarlo pero una cláusula de 3 millones de euros firmada con el equipo aragonés ha obrado el regreso del jugador zaragocista. Sin embargo, el Zaragoza no valora a Lafita en lo que vale, que es mucho, y ya piensa en otra operación para traspasarlo muy posiblemente al Atlético de Madrid a cambio de Jurado más una cantidad que habría que abonar a los de la rivera del Manzanares. No tiene mucho sentido. Jurado es muy bueno y ha progresado mucho este último año en Mallorca, pero Lafita no tiene nada que envidiarle. Es tan bueno como Jurado y además es de la cantera zaragocista. Si el Atlético no quiere a Jurado que lo fiche el Zaragoza, que vendan a Ewerthon y lo compren, pero no metan a Lafita en este asunto. Se arrepentirán.

El FC Barcelona nunca ha sido un club del que se hayan marchado bien sus figuras. Más bien dando el portazo. Así se fue un tal Diego Armando Maradona, un tal Bern Schuster, un tal Michael Laudrup, un fulano llamado Luis Figo y ahora parece que pasará lo mismo con un mengano llamado Samuel Eto´o. El Barça no es que no haya sabido nunca retener a sus estrellas, es que no ha sabido cuidarlas. Más pendiente de lo que sucede en el club blanco, los azulgrana tienen una capacidad para la autodestrucción verdaderamente encomiable. Han querido vender al camerunés desde el minuto 1 de la temporada pasada y ahora, después de que Samuel se haya hinchado a meter goles en la liga y tras hacer el primer gol de la Liga de Campeones. Ellos sabrán lo que hacen. Más goles no les va a dar el delantero que venga, se llame Forlán, Villa o Ibrahimovic. Entonces, si el compromiso con la camiseta y el número de goles que garantiza Eto´o es inigualable ¿por que cambiar de punta?. Tendrá Florentino algún infiltrado en la directiva azulgrana.

El fichaje de Moyá por el Valencia a cambio de 5 millones de euros es una decisión cuestionable. Un club como el de Mestalla que está de deudas hasta las cejas tiene la obligación de revisar con lupa todas sus adquisiciones para que cualquier gasto no pueda ser considerado como superfluo. Moyá es un buen portero, internacinal en todas las categorías inferiores excepto en la absoluta, lo mismo que el brasileño Renán. Pero tampoco es Sergio Asenjo, el portero con mayor proyección de España desde Iker Casillas y que el Atlético pretende adquirir del Valladolid por sólo 1,5 millones más de lo que ha pagado el Valencia por Moyá. Llama la atención que teniendo cubierta la portería con guardametas de garantías, con el veterano César y el joven Renán, que la entidad del murciélago haya apostado por la incorporación de otro portero a cambio de 5 millones de euros. El Valencia está condenado a asumir su situación de extrema graveda económica y debe dejar de comportarse como un club con un potencial que no posee. En caso contrario, mayor será la caída.