Tratado injustamente por el principal periódico deportivo de la capital, Manuel Pellegrini vuelve a España cuatro meses después de ser cesado por el Real Madrid tras haber cuajado una campaña muy respetable aunque sin títulos. A Pellegrini se le puede acusar de haber transigido con los caprichos e imposiciones de la directiva sobre los fichajes y traspasos del club blanco en la temporada que lo dirigió. Sin embargo, lo que le llevó a salir por la puerta del Santiago Bernabeu fueron su poco conchabeo con el polítiqueo mediático e institucional del Madrid, el "Alcorconazo" y sus decisiones sobre Kaká y Benzemá, a quienes se cansó de dar oportunidades y terminó por sentar en el banquillo como fichajes fracasados Sus declaraciones en contra de las ventas de Robben y Sneijder, decididas por la directiva a pesar de la recomendación técnica de mantenerles en la plantilla también influyó. Al final, todo el mundo pudo comprobar quien tenía la razón. Sneijder pugna por el Balón de Oro y Robben ha sido nombrado mejor jugador de la Bundesliga y uno de los más destacados del Mundial de Sudáfrica. Luego ha llegado Mourinho y le han fichado todo lo que ha pedido y más, pero aún no ha conseguido sacar petróleo ni de Benzemá ni del brasileño. Al final, el Madrid plantó batalla al Barça hasta el final, a pesar de tener una plantilla muy inferior, pero Pellegrini ya estaba sentenciado. Lo hará bien en Málaga, si le dejan. Por cierto, que el Real Madrid de Florentino, tan generoso le pagó al técnico chileno los cuatro millones de euros incluidos en el año de contrato que aún tenía por cumplir. Para que luego digan de los jeques del Málaga.