Decir que la baja de Khedira condicionará el choque Madrid-Barça de las semifinales de Champions puede sonar a ventajista si tenemos en cuenta la plaga de bajas que acucia al club azulgrana. Las ausencias de Abidal, Maxwell y Milito condicionan sobremanera la situación de los culés, a cuyas bajas deben añadir la de Bojan. Sin embargo, el partido del centrocampista alemán frente al FC Barcelona en la final de Copa destacó de forma mayúscula. Es cierto que por su pobre calidad técnica es un futbolista limitado en partidos que requieren una escasa intensidad física, sin embargo cuando el partido requiere de jugadores de una gran prestación atlética el alemán destaca muy por encima de todos. Su marcaje sobre Iniesta fue sobresaliente y sus subidas y bajadas constantes ayudaron a bombear el centro del campo madridista de una forma impresionante. Está claro que Khedira es un futbolista muy apropiado para encuentros que requieren de mucha intensidad y presión, ahí es donde despliega todas sus condiciones. Por este motivo, la baja del alemán en semifinales es una buena noticia para los azulgrana. El recambio natural Lass es un portento físico también, pero sus condiciones son otras, más dotado técnicamente tiene a la anarquía y a la distracción. Mientras, Khedira es un futbolista eficaz que se limita a hacer estupendamente bien lo que sabe hacer y que rehuye de experimentos y lucimientos innecesarios. Seguro que Mourinho aprecia sustancialmente esta baja.